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Cuando desperte era mas tarde de lo normal, me levante y me di cuenta que me encontraba sola, me vesti y decidi salir a caminar, todo me parecia muy extraño, las calles se encontraban vacias, no me asuste, pensaba que en algun momento iba a aparecer alguien, he de aceptar que despues de un rato me entro un ataque de panico al ver que nadie aparecia, que solo estaba yo y nadie mas.

No sabia que suedia, comence a correr desesperadamente esperando toparme con alguien o algo que me indicara que no solo era yo... en ese momento senti unas ganas de encontrarte, y no apareciste.

Despues de un rato el panico desaparecio, aquello que era tan extraño y a la vez irreal ya no me asustaba mas, al contrario se podia percibir un estado inmenso de paz, me senti tranquila y por un momento decidi sentarme en la acera. Me preguntaba una y otra vez que era lo que sucedia, no entendia lo que estaba pasando y mucho menos encontraba una respuesta logica ante tal situacion.

Pasaron las horas y el sol fue callendo, comenzaron a encenderse las luces de las calles, no sabia en donde me encontraba y mucho menos sabia el camino correcto para llegar a mi casa, habia caminado sin rumbo por horas que no me di cuenta cuando las calles dejaron de ser conocidas para pasar a ser desconocidas. Pero eso no me preocupaba algo dentro de mi me decia que estaba a salvo y que todo iba a estar bien.

De pronto me parecio ver una silueta, la luz de la calle revelaba una sombra dirigiendose asia donde me encontraba, senti miedo y al mismo tiempo curiosidad, una gran curiosidad de saber quien era y preguntarle que era lo que pasaba, y aunque esa persona se encontrara en la misma situacion que yo, no me importaba, asi que decidi caminar asia ella.

La luz poco a poco fue revelando su rostro, en ese momento ya no me senti sola, corri a abrazarte ... y yo alomejor alguna vez te llore.